Escrito por: Experto Neumático Tractor | 21 junio 2021
El impulso natural, que responde a una legítima preocupación por el ahorro, es optar por desgastar los neumáticos hasta el máximo, conservarlos el mayor tiempo posible para retrasar el momento de invertir en un juego de neumáticos nuevos. Es cierto que todas las explotaciones tienen sus prioridades financieras que rara vez incluyen los neumáticos agrícolas como inversión de primer plano.
Cambiar el tractor de arrastre o comprar un nuevo apero productivo representa un proyecto más fácil de planificar, ya que el retorno sobre la inversión parece más evidente o, al menos, más fácil de calcular. Sin embargo, una buena gestión de tu material, de los equipos y más específicamente de los neumáticos, presenta numerosas ventajas y el hecho de cambiar los neumáticos agrícolas en el momento de desgaste óptimo es parte de la solución para optimizar tu rentabilidad global.
La recomendación de la mayoría de constructores es cambiar los neumáticos cuando se alcanza el 75% de desgaste en la banda de rodadura, es decir, cuando las barras del neumático son tres cuartas partes de lo que eran cuando el neumático estaba nuevo.
Básicamente, parece normal utilizar un producto hasta que esté completamente desgastado pero, en el caso de los neumáticos, hay que tener en cuenta las nociones de eficiencia, productividad y seguridad. Por lo tanto, la respuesta a esta pregunta no será la misma para todo el mundo, no hay una regla absoluta, esto depende del uso más habitual que se haga del tractor.
Cuando superas el 75% de desgaste, se empiezan a notar efectos negativos en términos de prestaciones. Como el desgaste es muy gradual, estos efectos no son evidentes pero, sin que te des cuenta, las prestaciones se van degradando y se quedan lejos de la eficiencia original.
Cuando las barras están desgastadas en más de un 75%, tu neumático agrícola experimentará más problemas de tracción, sobre todo en suelo mojado. Toda la eficacia de tu tractor se reduce, independientemente de su potencia, que no disminuye.
Desgaste de los neumáticos trabajando en el campo
Cuando se trabaja en el campo, son las barras de tus neumáticos las que aseguran la transmisión de la potencia del motor al suelo y proporcionan una buena tracción a tu máquina y al apero.
Si las barras están desgastadas en más de un 75%, ya no garantizan una tracción óptima e inducen a un mayor deslizamiento en terrenos blandos y húmedos, independientemente de la presión que apliquemos. Un uso prolongado provocará un desgaste irregular y, en consecuencia, acentuará la pérdida de tracción y repercutirá en la calidad de circulación en carretera y, por lo tanto, en la seguridad y el confort.
Seguramente sabrás que utilizar una presión baja permite aumentar la superficie de contacto del neumático con el suelo y, por esta razón, normalmente aumenta la tracción, pero con barras desgastadas en más de un 75% y, por ello, tres veces menos profundas, reduces la capacidad de apoyo en el suelo por la mitad. Esto reduce significativamente la transmisión de su fuerza de tracción y hace perder mucho tiempo, especialmente si cultivas grandes parcelas.
Con el aumento del patinamiento, se genera un aumento del consumo de combustible y, además, una pérdida de tiempo. Circular con neumáticos desgastados en más de un 75% no es la mejor solución para ahorrar dinero, al contrario, sólo reduce la productividad, repercutiendo más globalmente en tu rendimiento. Además, como hay poca adherencia, aumentará el patinamiento y el derrape, lo que inevitablemente afectará a tus suelos.
Cuando conducimos en carretera, podemos llegar fácilmente al 85% de desgaste. Esto representa el 85% de la altura de las barras del neumático nuevo. En efecto, la profundidad de las barras no se utiliza en los desplazamientos sobre suelos duros o sobre el asfalto.
Podemos hacer que los neumáticos duren más circulando siempre con la presión correcta. Atención, en carretera, la presión debe ser mayor para reducir el contacto del neumático con el suelo y reducir la resistencia a la rodadura.
No obstante, hay que saber que la superficie de la carretera es mucho más abrasiva que la tierra y, si circulamos con una carga pesada a alta velocidad, la goma se calienta rápidamente al entrar en contacto con el suelo y debilita las diferentes capas que componen el neumático, incluidas las barras.
Las aceleraciones frecuentes y los frenazos bruscos también aceleran el desgaste de la goma de los neumáticos agrícolas, cuya función principal no es circular por terrenos duros o asfaltados, sino más bien sobre terrenos blandos.
Neumáticos: desgaste debido al transporte en carretera
Por supuesto, puedes superar la tasa de desgaste del 75% para seguir trabajando en la granja sin que ello tenga ninguna incidencia en tu trabajo, o en tu productividad. El uso frecuente maniobrando, para cargar o descargar la paja, alimentar a los animales, etc. pueden provocar el desgaste prematuro de los neumáticos agrícolas.
Además de la reducción de la altura de las barras, el desgaste se manifiesta generalmente con la presencia de posibles cortes en la parte superior de las barras o en los flancos del neumático que pueden tener varios orígenes: suelos pedregosos, revestimientos irregulares en el suelo de la granja, herramientas u objetos metálicos en el suelo, etc.
Aunque se puede circular con más del 75% de desgaste, está especialmente recomendado no sobrepasar nunca el mínimo de 10 mm de altura de las barras ya que, más allá de este límite, el neumático está realmente desgastado y ya no garantiza sus funciones a nivel de seguridad. Los riesgos de accidente son reales y pueden ser irreversibles.
Si los tacos alcanzan los 10 mm de altura con un uso normal en el campo y un uso moderado en carretera, es porque el neumático ha superado su tiempo de vida útil y puede provocar problemas causados por el envejecimiento natural de los componentes, como una alteración de la estructura de los polímeros, u otros efectos químicos en el caucho que compone el neumático.
Al rodar con neumáticos demasiado viejos, los riesgos aumentan: averías, pinchazos, o accidentes.
Envejecimiento excesivo y altura de los tacos demasiado baja
Cuando el nivel de desgaste mínimo de las barras no se respeta, se corre el riesgo de dañar directamente la estructura interna del neumático agrícola. Tanto si circulas en carrera como en el campo, el riesgo de tener una avería aumenta proporcionalmente con el nivel de desgaste, y esto puede ser causado por una simple rama, una raíz, una piedra, un bache en la carretera o un ligero impacto frontal o lateral.
Tras un impacto, incluso ligero, en un neumático desgastado, la aparición en el momento de aplicar la presión de una pequeña hernia en la banda de rodadura, o en el flanco del neumático, es el signo precursor de un reventón del neumático, sobre todo si transportas cargas pesadas, como durante la cosecha por ejemplo.
Aparición de una hernia en el flanco del neumático,
El riesgo de reventón también se hace omnipresente, aumenta con el nivel de desgaste y puede ocurrir en cualquier momento. Al menor obstáculo (grava, piedras, rama, objeto metálico…), tu neumático agrícola puede reventar, puesto que la altura reducida de las barras ya no protege el fondo del dibujo y los cortes se vuelven inevitables. Por lo tanto, corres el riesgo de inmovilizar tu tractor junto con el apero en cualquier momento y en cualquier lugar.
Las pérdidas económicas serán todavía mayores si la inmovilización se produce en un lugar inadecuado.
En cualquier caso, habrá que acudir a un profesional para realizar la reparación in situ, cuyos costes suelen ser relativamente elevados y suelen requerir la sustitución del tren de neumáticos desgastados.
Cortes en el fondo del dibujo
Aparte de las posibles inmovilizaciones o de los accidentes que pueden producirse a causa del uso de unos neumáticos desgastados, la normativa vigente prohíbe circular por la carretera con neumáticos incluso muy ligeramente dañados.
La ley estipula que los neumáticos deben presentar el dibujo de la banda de rodadura claramente visible en toda su superficie y que los flancos no deben presentar ningún corte o ningún desgarro profundo. Los componente internos (lona…) nunca deben ser visibles ni en la superficie, ni en los flancos, ni en la parte inferior de la estructura del neumático.
Con este tipo de desgaste, corres el riesgo de tener que pagar una multa cuyo importe puede ser elevado y puede suponer la inmovilización del vehículo y la obligación de repararlo en el acto.
Lo ideal es encontrar un compromiso adecuado entre disfrutar de la eficiencia de un neumático nuevo y el coste de cambiar el neumático desgastado. Hay que poder beneficiarse de las ventajas de los neumáticos nuevos y, al mismo tiempo, optimizar la inversión de la sustitución.
También hay que tener en cuenta que un cambio anticipado cuesta menos que hacer una reparación aparte del coste de cambiarlos, por no hablar del tiempo de inmovilización en lugares inadecuados o inaccesibles, y del tiempo de inactividad de tu equipo que son otros tantos elementos que cabe incorporar en nuestra planificación.
Con esta solución, nunca inmovilizarás una gran cantidad de dinero en tu inversión en neumáticos. Así conseguirás unos costes bajos, fijos y regulares para tus neumáticos con una entrada de dinero en cada reventa y dispondrás permanentemente de material nuevo o reciente para aumentar en eficiencia y productividad.
La estimación del precio de reventa de un neumático en el mercado de segunda mano depende de varios criterios:
La compra de un nuevo juego de neumáticos agrícolas representa una inversión importante.
Los tipos de interés actuales son bajos y el coste adicional se compensa en gran medida con el ahorro en combustible que se consigue trabajando durante el primer año. En efecto, utilizar neumáticos nuevos es beneficioso para tu rendimiento, ya que optimiza la transmisión del par de motor de tu tractor en la fuerza de tracción.
Ganas así en potencia y, por lo tanto, en velocidad de trabajo y, en lugar de trabajar más tiempo con neumáticos desgastados, tienes la posibilidad de cubrir más superficie en una jornada con neumáticos nuevos. Estos últimos también evitan un patinamiento excesivo gracias a unas barras nuevas, lo que reduce considerablemente el consumo en combustible y la alteración del suelo.
Cuando sustituyes tus neumáticos mediante un pago aplazado, obtienes una entrada de dinero gracias a la venta de tus neumáticos de ocasión, sin inversión, ya que la compra está cubierta por el banco. Esto significa que dispones de una situación de liquidez positiva y de un par de neumáticos nuevos, que te permitirán efectuar un trabajo más rápido y ahorrar en combustible inmediatamente.
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